Continúan las obras de la sección arqueológica del Terra Sancta Museum
El lunes 25 de noviembre se retomaron las obras del Terra Sancta Museum en el convento de la Flagelación, en la Via Dolorosa de la ciudad vieja de Jerusalén. La primera parte del museo que hospeda las colecciones arqueológicas del Studium Biblicum Franciscanum fue inaugurada el 2018 y durante los trabajos de construcción de los espacios museísticos surgió la necesidad de consolidar algunas partes de la estructura del futuro museo. Desde el día de la apertura de las primeras salas, el estudio y el análisis de los problemas estáticos y estructurales no han cesado, y ahora ha llegado el momento de iniciar los trabajos.
El museo se desarrollará en la planta baja del convento de la Flagelación. Una primera fase de los trabajos prevé la consolidación de las estructuras existentes, con intervenciones destinadas a hacer que el edificio gane nuevas prestaciones, como la resistencia sísmica. Durante esta fase de trabajo se resolverán los problemas estructurales de los cimientos, en el cuerpo de los pilares que sostienen el techo, y en las vigas y paredes. El piso existente de la planta superior también se reforzará con fibra de carbono, un material de vanguardia muy delgado y ligero que permite integrar la resistencia de las vigas y la plancha sin aumentar el espesor ni sobrecargar la estructura. En el caso del Terra Sancta Museum, la fibra de carbono permitirá no desperdiciar espacios, útiles para la ingeniería de las plantas o para aspectos puramente arquitectónicos y funcionales, sin afectar a la luminosidad de la sala.
Para estas obras se han usado algunas herramientas sofisticadas, como la tecnología láser que ha permitido reconstruir virtualmente, punto a punto, el área del museo en detalle, y proporcionar una información que de otro modo sería difícil de obtener. El escáner ha ayudado de un modo particular a reconstruir la antigua cisterna, posicionada debajo de la sala donde se están llevando a cabo los trabajos. Los delgados pilares que sujetan el techo tienen sus propios cimentos en la cisterna y era necesario comprender si la parte enterrada en el interior de la cisterna estaba alineada con la parte superior, como efectivamente se ha confirmado tras el estudio.
La segunda fase de los trabajos supone la construcción de nuevas estructuras para el museo. La intervención más importante será la construcción de una entreplanta donde se desarrollará la última sección de la exposición. La losa se fabricará fuera de la construcción y posteriormente se montará en el lugar definitivo, para esto será necesaria una precisión milimétrica en el diseño, que ha permitido la tecnología del escáner.
El proyecto arquitectónico general del museo es del estudio Tortelli e Frassoni Associati de Brescia, ya director de las obras de la primera parte del museo, realizado gracias a la coordinación y recaudación de fondos gestionada por ATS, Associazione pro Terra Sancta. La dirección de las obras corre a cargo del estudio Schaffer & Ronen de Jerusalén, en colaboración con el estudio italiano R+Struct, bajo la supervisión de la Oficina Técnica de la Custodia, dirigido por el ingeniero Leonardo di Marco. La ejecución de las obras será llevada a cabo por la empresa Expressions Engineering, encargada también de la reestructuración de la iglesia de San Juan de Ain Karem.
Los trabajos de consolidación y construcción de la nueva estructura ocuparán entre seis y siete meses de ejecución. Terminadas estas fases se podrán iniciar las obras de acondicionamiento, para las que se han estimado otros seis meses de trabajo.